INGREDIENTES
1 kilo de harina
½ litro aceite de oliva
¼ litro de vino
blanco
1 copa de anís
1 huevo
La cáscara de un limón
La cáscara de una naranja
½ bote de matalahúga (anís) en grano
1 cucharada de ajolín
5 clavos
2 cucharadas de azúcar
Según cantidad de harina que se quiera usar ahí que medir las cantidades de los demás
ingredientes.
PREPARACIÓN
En una sartén echamos el aceite, con la cáscara de limón y
la cáscara de naranja, esto mas que nada es para dar sabor, dejamos que hierba
el aceite por un minuto y retiramos del fuego dejamos se enfríe.
Cuando el aceite este frío retiramos la cáscara de naranja y
la cáscara de limón, echamos en un bol hondo y grande, el aceite, e
incorporamos el vino, la copa de anís, el azúcar, el huevo batido, la matalahúva,
el ajolín, y los clavos machacados.
Los mezclamos todo muy bien, con una cuchara de madera, y
poco a poco vamos añadiendo la harina, amasando, para evitar que se hagan
grumos, tenemos que amasar ya con las manos hasta que consigamos tener una masa
que no se pegue a los bordes del bol.
Cuando lo tengamos bien amasado, lo dejamos en el mismo bol una
hora para que repose tapándolo con un paño de cocina.
Luego cogemos un rodillo y lo aplanamos, cogemos con un vaso
u otro utensilio, y hacemos, círculos, esos círculos los doblamos y hacemos los
pestiños en la parte que se dobla le metemos los dedos, para que no se
desprenda la unión y quede enrollado que es lo que pretendemos.
Cuanto los tengamos preparados, ponemos una sartén con
aceite de freír, que el aceite no este ni muy caliente, ni muy frío, lo freímos
controlándolo para que no se queden muy negro.
Cuando este terminado lo pasamos por miel, lo tenemos que
pasar por la miel estando caliente.
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